Novedades: Hormigón autocompactante
Es ideal para espacios de acceso limitado, para hormigones vistos y con necesidades específicas ya que no requiere de vibradores para ser compactado.

El hormigón autocompactante (self consolidating concrete por su sigla en inglés) es un concreto tan fluido que no hace falta el uso de vibradores para compactarlo. Esa ventaja viene a satisfacer una de las necesidades más específicas del mercado: Utilidad en lugares de acceso limitado.

El hormigón autocompactante fluye mejor entre el acero y alrededor de este, por lo cual evita en gran medida la creación de bolsas de aire ocultas, que podrían producir que el acero se corroa en un futuro y además una mayor permeabilidad, condiciones no deseadas en el hormigón. De hecho, en el Mercado internacional, el hormigón autocompactante va ganando lugar.

Ventajas del hormigón autocompactante

El hormigón autocompactante tiene diversas ventajas, tanto para el productor de concreto, como para el contratista.

El hormigón autocompactante es sumamente fluido, sin embargo muy estable. Por lo cual, puede fluir rápidamente llenando todos los espacios sin experimentar compactación ni segregación significativa.

El hormigón autocompactante requiere una preparación muy técnica donde un poco de agua de más, puede echar a perder toda la consistencia. Por esto, se clasifica como un producto de desempeño con valor agregado. Su utilización requiere una línea de aprendizaje diseñada especialmente para cada aplicación y para las condiciones de uso.

El hormigón autocompactante mantiene una estrecha relación con los aditivos de viscosidad. Estos, generalmente, son materiales artificiales que permiten que una mezcla de hormigón líquida, que de otra manera tendría gran cantidad de agua, fluya de manera homogénea. La mayoría de modificadores de viscosidad están compuestos por materiales de polímero a base de celulosa.

¿Cuál es la paradoja del hormigón autocompactante? Para garantizar la estabilidad de la mezcla autocompactante se aumenta la cantidad de agua necesaria, lo cual se traduce en un incremento de la contracción por secado y en la fluencia del concreto en estado endurecido.

Por esto es sumamente importante el uso responsable de los modificadores de viscosidad para garantizar al hormigón autocompactante la estabilidad requerida sin afectar la contracción por secado ni la fluencia evitando que la mezcla segregue.